El trasplante de pelo está indicado en aquellos casos en que falte pelo en una zona donde existía, siempre y cuando el pelo no pueda volver a aparecer en la misma de forma natural o mediante tratamiento médico.
El trasplante capilar con la Técnica FUE es el más solicitado en CapMédica. El trasplante capilar con técnica FUE es el más avanzado trasplante de pelo para tratar calvicies y alopecias tanto en hombres como mujeres. Se trata de una redistribución sistemática y artística de los folículos pilosos que consiste en la introducción de pequeños injertos de cuero cabelludo que contienen las llamadas “unidades foliculares” (grupos de 1, 2, 3 o 4 folículos pilosos tal y como vienen determinados de forma natural).
Estos injertos se obtienen con anestesia local de la zona posterior y/o lateral del cuero cabelludo (lo que llamamos zonas donantes) y, tras prepararlos minuciosamente bajo el microscopio, son introducidos cuidadosamente mediante microincisiones en las zonas calvas o de escaso pelo que evolucionarían hacia la calvicie (o sea, las zonas receptoras).
Al obtenerse los injertos de las áreas posterior y lateral de la cabeza, genéticamente programados para crecer toda la vida al poseer receptores hormonales que no se ven afectados por la hiperactividad enzimática, se logra que una vez injertados en otras áreas no caigan y continúen creciendo normalmente.
Técnica FUE paso a paso
- El paciente llega por la mañana y es recibido por las auxiliares de la clínica.
- Se repasará toda la documentación y se entregará el consentimiento informado firmado.
- La auxiliar lo acompañará al vestuario para que se ponga el pijama quirúrgico y las calzas.
- El médico se encontrará con el paciente en una de las salas y le explicará de nuevo todos los aspectos del proceso y repasará una vez más los detalles del diseño del trasplante.
- Se tomarán fotografías antes y después de la realización del diseño del trasplante, que servirán para monitorizar la evolución.
- Se rasurará la zona receptora para poder acceder con mayor facilidad a los injertos.
- Tras rasurar se marcarán los límites de la zona receptora.
- Tras repasar el diseño y rasurar al paciente, este pasará al quirófano con el médico y la enfermera, que procederá a monitorizarlo.
- El paciente deberá acostarse boca abajo para iniciar la cirugía.
- La cirugía comienza aplicando una solución antiséptica en la zona donante y anestesiándola localmente. Los pinchazos de anestesia son prácticamente indoloros, ya que se utiliza la técnica de la anestesia vibratoria durante los mismos.
- Cuando la zona está completamente anestesiada, se procede a la extracción de las unidades foliculares con un micro bisturí cilíndrico de 0,8 mm de diámetro y unas micropinzas que evitan que el folículo se dañe al manipularlo. Durante la extracción se emplean lupas de precisión para extraer las unidades foliculares.
- Las unidades foliculares que se extraen se van almacenando en placas de Petri refrigeradas y son sumergidas en una solución salina para aumentar su supervivencia.
- Estas unidades foliculares son preparadas por el equipo quirúrgico y con la ayuda de estereomicroscopios. Esta metodología favorece la correcta manipulación y supervivencia de los injertos.
- Tras la fase de extracción llega un período de descanso para el paciente, durante el que podrá comer y beber algo.
- Cuando el paciente se encuentre recuperado dará comienzo la fase de implantación. En esta fase se deberá de aplicar la misma solución antiséptica usada en la fase de extracción y se anestesiará la zona con el mismo tipo de anestesia vibratoria. Para la implantación se utilizan unas herramientas denominadas implanters, que permiten hacer la incisión receptora y depositar el folículo en una misma acción. Durante la implantación también se emplean lupas de precisión para implantar las unidades foliculares.
- Tras terminar la implantación, se vuelven a realizar fotografías de control para monitorizar la evolución del trasplante y se procede aplicar una crema antibiótica y a vendar la zona, la zona donante con un apósito. Por su parte, la zona receptora quedará descubierta.
- Al terminar la implantación, el paciente recibe por escrito las recomendaciones postoperatorias que explican cómo hacer los primeros lavados y cómo tomar la medicación postoperatoria.
- El paciente recibe al finalizar la intervención un paquete que incluye toda la medicación que necesitará para el postoperatorio, así como utensilios para la higiene diaria adecuados para el postoperatorio.
La mayor parte del pelo trasplantado se caerá durante el primer mes. Este pelo volverá a crecer de forma natural pasado 6-9 meses de la intervención. El resultado final se podrá valorar a los 12 meses.
El pelo trasplantado será un pelo normal que crecerá como el resto y tendrá las características del pelo en la zona donante, lo que lo hará resistente a la miniaturización que se produce en la alopecia androgenética.